10 poemas infantiles de Manoel de Barros para leer con los niños

10 poemas infantiles de Manoel de Barros para leer con los niños
Patrick Gray

La poesía de Manoel de Barros está hecha de simplicidades y cosas "sin nombre".

El escritor, que pasó su infancia en el Pantanal, se crió en plena naturaleza y, por ello, llevó a sus textos todo el misterio de los animales y las plantas.

Sus escritos encantan a personas de todas las edades, ya que conectan, sobre todo, con el universo infantil El escritor consigue exponer sus reflexiones sobre el mundo a través de las palabras de forma imaginativa y sensible.

Hemos seleccionado 10 poemas de este gran autor para que se los leas a tus hijos.

1. Mariposas

Las mariposas me invitaban a ellas.

El privilegio insetal de ser una mariposa me atraía.

Sin duda tendría una visión diferente de los hombres y de las cosas.

Imaginaba que el mundo visto desde una mariposa lo sería, seguro,

un mundo libre de poemas.

Desde ese punto de vista:

He visto que los árboles son más expertos en auroras que los hombres.

He visto que las tardes las disfrutan más las garzas que los hombres.

Vi que las aguas tienen más calidad para la paz que los hombres.

He visto que las golondrinas saben más sobre las lluvias que los científicos.

Podría narrar muchas cosas que he visto desde el punto de vista de

una mariposa.

Allí incluso mi fascinación era azul.

Manoel de Barros publicó este poema en el libro Ensayos fotográficos En él, el escritor nos invita a imaginar el mundo a través de la "mirada" de las mariposas.

¿Y cómo sería esto? Según el autor sería ver las cosas de forma "insetal". Esta palabra no existe en la lengua portuguesa, es un término inventado y se llama neologismo a este tipo de creación.

Manoel de Barros utiliza mucho este recurso en sus escritos para dar nombre a sensaciones que aún no han sido definidas.

Aquí llega a algunas "conclusiones" a través de su mirada subjetiva y casi etérea. Podemos decir que el autor muestra básicamente una inteligencia y sabiduría de la naturaleza mucho mayor que la de los seres humanos, que a menudo olvidan que forman parte de la naturaleza.

2. El niño que llevaba agua en un colador

Arte realizado por bordadoras de Minas Gerais, grupo Matizes Dumont, que ilustra el libro Ejercicios de ser niño

Tengo un libro sobre el agua y los niños.

Me gustaba más un chico

que llevaba agua en el colador.

Madre dijo que llevar agua en el colador

era lo mismo que robar un viento y

corriendo con él para enseñárselo a sus hermanos.

La madre dijo que era lo mismo

que sacar espinas del agua.

Lo mismo que criar peces en el bolsillo.

Al chico le gustaban las tonterías.

Quería sentar las bases

de una casa en rocío.

La madre se dio cuenta de que el niño

Me gustaba más el vacío que la plenitud.

Hablaba de que el vacío es mayor e incluso infinito.

Con el tiempo ese chico

que era cismático y raro,

porque le gustaba llevar agua en el colador.

Con el tiempo descubrió que

la escritura sería la misma

que llevar agua en el tamiz.

En la escritura el chico vio

que era capaz de ser un novato,

monje o mendigo al mismo tiempo.

El niño ha aprendido a usar las palabras.

Vio que podía hacer maravillas con las palabras.

Y empezó a hacer peraltaciones.

Fue capaz de cambiar la tarde haciendo llover sobre ella.

El chico hacía milagros.

Incluso hizo florecer una piedra.

La madre se fijó en el niño con ternura.

La madre le dijo: "Hijo mío, ¡vas a ser poeta!

Llevarás agua en el colador toda tu vida.

Rellenarás los huecos

con sus peraltaciones,

¡y algunas personas te amarán por tus tonterías!

Este hermoso poema forma parte del libro Ejercicios de ser niño A través del texto, nos adentramos en el universo psicológico, fantástico, poético y absurdo de un niño.

El niño que llevaba agua en un colador narra las travesuras de un niño al que le gustaba hacer cosas que se consideraban ilógicas, pero que para él tenían otro significado. Para él, esas travesuras formaban parte de un sistema más amplio y fantástico de juegos que le ayudaban a entender la vida.

En el poema, percibimos la relación amorosa de la madre con su vástago. Ella, al principio, argumenta que "llevar agua en el colador" era algo sin sentido, pero más tarde se da cuenta del poder transformador e imaginativo de esta acción.

La madre anima entonces a su hijo, que con el tiempo también descubre la escritura, y le dice que será un buen poeta y que marcará la diferencia en el mundo.

En este poema, podemos considerar que, tal vez, el personaje sea el propio autor, Manoel de Barros.

3. A bem-te-vi

La luz y la suavidad

rayo de sol

se pone en el río.

Duerme una siesta...

Del árbol evola

amarillo, desde arriba

tangara escarlata

y, de un golpe

corrimiento de tierras

en el comedero

bañando tu rubio

...para la trama...

Con un escalofrío, en la valla

ya abierto y seco.

El poema en cuestión forma parte del libro Compendio para el uso de aves En este texto, Manoel describe una escena bucólica y bastante habitual de un bem-te-vi bañándose a última hora de la tarde.

El autor, a través de las palabras, nos lleva a imaginar y contemplar un acontecimiento ordinario pero increíblemente bello.

Este breve poema puede leerse a los niños como una forma de fomentar la imaginación y el aprecio por la naturaleza y las cosas sencillas, situándonos como testigos de la maravillas del mundo .

4. Pequeño mundo I

Mi mundo es pequeño, Señor.

Tiene un río y un poco de arbolado.

Nuestra casa se construyó de espaldas al río.

Las hormigas cortan los rosales de la abuela.

Al fondo del patio hay un niño y sus maravillosas latas.

Todas las cosas en este lugar ya están comprometidas con las aves.

Aquí, si el horizonte se arruga un poco,

los escarabajos creen que están en el fuego.

Cuando el río está empezando un pez,

Él me cosa.

Me salió rana.

Me arborizó.

Por la tarde un anciano tocará su flauta para invertir

las puestas de sol.

Ver también: Película La fantástica fábrica de chocolate: resumen e interpretaciones

Un mundo pequeño se encuentra en el Libro de las Ignorancias Una vez más Manoel de Barros nos invita, en este poema, a conocer su espacio, su casa, su patio trasero.

Se trata de un mundo natural Es un lugar lleno de sencillez, plantas y animales, que el autor consigue convertir en un entorno mágico, de contemplación e incluso de gratitud.

En el texto, el protagonista es el propio mundo. El niño en cuestión se presenta amalgamado con la naturaleza, y el autor aparece entonces también inmerso en este lugar, intensamente afectado por la fuerza creadora de los animales, las aguas y los árboles.

Los niños pueden identificarse con el escenario propuesto e imaginar a la abuela, al niño y al anciano, figuras que pueden aportar un rescate y una sugerencia para un infancia sencilla y sin complicaciones.

5. Bernardo es casi un árbol

Bernardo es casi un árbol

Su silencio es tan fuerte que los pájaros oyen

con diferencia

Y vienen a posarse en tu hombro.

Tu ojo renueva las tardes.

Guarda sus herramientas de trabajo en un viejo baúl;

1 abridor al amanecer

1 clavo que se parte

1 encogedor de río - y

Camilla de 1 horizonte.

(Bernardo consigue estirar el horizonte utilizando tres

Hebras de telarañas. La cosa se pone bastante tensa).

Bernardo desregula la naturaleza:

Su ojo magnifica la puesta de sol.

(¿Puede un hombre enriquecer la naturaleza con su

¿Incompletitud?)

En Libro de las Ignorancias En su libro de 1993, Manoel de Barros incluyó el poema Bernardo es casi un árbol En ella, el personaje de Bernardo conlleva tal intimidad con la naturaleza y un sentido de la percepción del todo que es casi como si él mismo se transformara en un árbol.

Manoel traza una fructífera relación entre el trabajo y la contemplación, dando la debida importancia al ocio creativo y a la sabiduría adquirida en el contacto con las cosas naturales.

En el poema, tenemos la sensación de que el personaje es un niño. Sin embargo, en realidad, Bernardo era un empleado de la hacienda de Manoel, un sencillo hombre de campo que conocía íntimamente los ríos, los horizontes, el amanecer y los pájaros.

6. La niña tonta

Fue en la granja de mi padre en los viejos tiempos

Yo tendría dos años; mi hermano, nueve.

Mi hermano solía clavar la caja

dos ruedas de lata de guayaba.

Íbamos a viajar.

Las ruedas estaban escalonadas bajo el cajón:

Uno miró al otro.

A la hora de caminar

las ruedas se abrieron al exterior.

De modo que el coche se arrastró por el suelo.

Iba a quedarme dentro de la caja

con las piernecitas recogidas.

Fingió estar de viaje.

Mi hermano estaba tirando de la caja

por una cuerda de embira.

Pero se decía que el carro era tirado por dos bueyes.

Yo estaba a cargo de los bueyes:

- ¡Maravilloso!

- ¡Vamos Redomão!

Mi hermano dijo

que cuidaría

porque Redomam era pañero.

Las cigarras derretían la tarde con sus cantos.

Mi hermano quería llegar pronto a la ciudad -

Porque tenía una novia allí.

La novia de mi hermano le estaba dando fiebre.

Que contaba.

En el camino, antes, necesitábamos

de cruzar un río inventado.

En el cruce el coche se hundió

y los bueyes se ahogaron.

No morí porque se inventara el río.

Siempre llegábamos al final del patio

Y mi hermano nunca vio a su novia -

¿Qué dice? Que le dio fiebre al cuerpo".

La niña tonta compone el libro Ejercicios de ser niño Al leer este poema, viajamos junto a la niña y su hermano y nos adentramos en los recuerdos de su primera infancia.

Aquí se narra una juego imaginativo El poeta consigue componer una escena de diversión infantil retratando el imaginario de los niños, que viven verdaderas aventuras en su mundo interior, pero que en realidad sólo cruzaban el patio de casa.

Manoel de Barros eleva, con este poema, la capacidad creativa de los niños a otro nivel. El escritor también expone el sentimiento del amor de forma ingenua, con sutil belleza, a través de la novia de su hermano.

7. El Hacedor del Alba

Me lesiono en los tratamientos con máquinas.

Tengo ganas de inventar cosas útiles.

En toda mi vida sólo he diseñado

3 máquinas

Como por ejemplo:

Una pequeña manivela para recuperar el sueño.

Ver también: 13 mejores libros infantiles de la literatura brasileña (analizados y comentados)

Un fabricante de amaneceres

para uso de los poetas

Y un platino de yuca para el

fordeco de mi hermano.

Incluso gané un premio de las industrias

coches por la Platinum Platinum de Yuca.

Fui aclamado como un idiota por la mayoría

de las autoridades en la ceremonia de entrega.

Por lo que me sentí algo soberbio.

Y la gloria entronizada para siempre

en mi existencia.

En este poema, publicado en el libro El Hacedor del Alba en 2011, el poeta subvierte el significado de las palabras y exhibe con orgullo su regalo para cosas "inútiles .

Nos dice que sus únicos "inventos" eran objetos fantásticos para fines igualmente utópicos. Manoel consigue conciliar el carácter práctico de las herramientas y las máquinas con un aura imaginativa que se considera superflua.

Sin embargo, la importancia que el autor da a estas inutilidades es tan grande que considera un halago ser calificado de "idiota" en esta sociedad.

8. El colector de residuos

Utilizo palabras para componer mis silencios.

No me gustan las palabras

cansado de informar.

Doy más respeto

los que viven del vientre en el suelo

como rana de piedra de agua.

Entiendo bien el acento de las aguas

Respeto las cosas sin importancia

y seres sin importancia.

Valoro más a los insectos que a los aviones.

Valoro la velocidad

de las tortugas más que la de los misiles.

Tengo en mí a un retrasado de nacimiento.

Me han tendido una trampa

que le gusten los pájaros.

Tengo la abundancia de ser feliz por ello.

Mi patio es más grande que el mundo.

Soy reciclador:

Me encantan las sobras

como buenas moscas.

Quería que mi voz tuviera una forma

esquina.

Porque no soy informático:

Soy de la invención.

Sólo utilizo palabras para componer mis silencios.

Poema extraído de Recuerdos inventados: la infancia de Manoel de Barros 2008. El colector de residuos exhibe a un poeta cuya característica es "coleccionar" cosas sin importancia.

Valora estas cosas, considerando los acontecimientos banales de la naturaleza como verdaderas riquezas. Así, rechaza la tecnología en favor de los animales, las plantas y los elementos orgánicos.

Otro punto importante del texto se refiere a la silencio preciocidad Aquí muestra su intención de utilizar las palabras como herramientas para decir lo "indecible", creando en los lectores un espacio interno de contemplación de la existencia.

9. Dios dijo

Dios dijo: Te voy a dar un regalo:

Te perteneceré a un árbol.

Y me pertenecía.

Escucho el perfume de los ríos.

Sé que la voz de las aguas tiene acento azul.

Sé cómo poner una pestaña en los silencios.

Para encontrar el azul utilizo pájaros.

No quiero caer en la sensiblería.

No quiero la buena razón de las cosas.

Quiero el hechizo de las palabras.

El poema en cuestión aparece en el proyecto La biblioteca de Manoel de Barros una recopilación de todas las obras del poeta, publicada en 2013.

En el texto, el autor manipula las palabras, aportando nuevos significados y sorprendiendo al lector al combinar diferentes sensaciones en una misma frase, como en el caso de "escuchar el perfume de los ríos". Manoel utiliza este recurso de la sinestesia en sus obras.

El poema se aproxima al universo infantil, pues sugiere escenas fantásticas que lo acercan a la naturaleza, teniendo relación incluso con el juego, como en el verso "sei botar cílios nos silencios".

10. Ejercicios de ser niño

Bordado de mujeres de Minas Gerais, que ilustra la portada del libro Ejercicios de ser niño

En el aeropuerto el chico preguntó:

-¿Y si el avión tropieza con un pájaro?

Papá se puso torcido y no contestó.

volvió a preguntar el chico:

-¿Y si el avión tropieza con un triste pajarito?

La madre tenía ternura y pensamiento:

¿No son los absurdos las mayores virtudes de la poesía?

¿No son los disparates más cargados de poesía que de sentido común?

Saliendo de la asfixia, el padre reflexionó:

Por supuesto, aprendemos libertad y poesía de los niños.

Y así se quedó.

Este poema forma parte del libro Ejercicios del ser niño Aquí, Manoel de Barros expone de forma increíble la ingenuidad y la curiosidad infantiles a través del diálogo entre un niño y sus padres.

El niño hace una consulta muy pertinente en su imaginación, pero como es algo que no concierne a los adultos, acaba siendo recibida con sorpresa.

Sin embargo, el niño insistió, queriendo saber qué pasaría si un avión chocara en pleno vuelo con un pájaro triste. La madre comprendió entonces que esa curiosidad también conllevaba una gran belleza y poesía.

Manoel de Barros pone música a los niños

Algunos de los poemas del escritor se convirtieron en canciones para niños a través del proyecto Reefers Pasó 5 años estudiando la obra del poeta para escribir las canciones.

Vea uno de los clips del proyecto realizados con esta técnica de animación.

BERNARDO CRIANCEIRAS

¿Quién era Manoel de Barros?

Manoel de Barros nació el 19 de diciembre de 1916 en Cuiabá, Mato Grosso. Se licenció en Derecho en Río de Janeiro en 1941, pero ya había publicado su primer libro, titulado Poemas concebidos sin pecado .

En los años sesenta comenzó a dedicarse a su granja en el Pantanal y a partir de los ochenta ganó reconocimiento público. El escritor tuvo una intensa producción, publicando más de veinte libros a lo largo de su vida.

En 2014, tras someterse a una intervención quirúrgica, Manoel de Barros falleció, el 13 de noviembre, en Mato Grosso do Sul.

Libros de Manoel de Barros dirigidos a los niños

Manoel de Barros escribía para todo tipo de público, pero su forma espontánea, sencilla y fantasiosa de ver el mundo acabó cautivando al público infantil:

  • Ejercicios de ser niño (1999)
  • Poemas tomados de una línea de João (2001)
  • Poemas en lenguaje lúdico (2007)
  • El Hacedor del Alba (2011)

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    Patrick Gray
    Patrick Gray
    Patrick Gray es un escritor, investigador y empresario apasionado por explorar la intersección de la creatividad, la innovación y el potencial humano. Como autor del blog "Culture of Geniuses", trabaja para desentrañar los secretos de equipos e individuos de alto rendimiento que han logrado un éxito notable en una variedad de campos. Patrick también cofundó una firma de consultoría que ayuda a las organizaciones a desarrollar estrategias innovadoras y fomentar culturas creativas. Su trabajo ha aparecido en numerosas publicaciones, incluidas Forbes, Fast Company y Entrepreneur. Con experiencia en psicología y negocios, Patrick aporta una perspectiva única a su escritura, combinando conocimientos basados ​​en la ciencia con consejos prácticos para lectores que desean desbloquear su propio potencial y crear un mundo más innovador.